Buenos Aires posee un patrimonio arquitectónico desconcertante y sugestivo. Las múltiples fuentes de inspiración y la tendencia local a la reelaboración consolidaron en los dos últimos siglos una herencia artística vasta y ecléctica. Este blog pretende mostrar a través de fotografías algunos de esos detalles que suelen escaparse a quien camina sin mirar por donde pasa.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Edificio Kavanagh



El Edificio Kavanagh es una torre de departamentos situada en el n.º 1065 de la calle Florida, frente a la Plaza San Martín, en el barrio de Retiro de la ciudad de Buenos Aires.
El Kavanagh es uno de los emblemas del movimiento moderno Argentino. Al Construirse en 1933 no se trata de un edificio Art Decó Puro, en sus líneas también observamos una fuerte influencia del expresionismo Europeo.
A comienzos de la década de 1930 Corina Kavanagh era una joven estanciera de origen irlandés, excéntrica e interesada en todo lo que fuera vanguardia, al punto que hacia 1933 tuvo la idea de vender dos de sus estancias para construir un edificio de rentas destinado a vivienda. Hay quienes dicen que la idea fue en realidad de sus abogados, Diego Garret Kavanagh y Pablo Cárdenas. Sin embargo, lo cierto es que Corina vendió sus tierras y compró un terreno sobre la barranca que da a la Plaza San Martín, un triángulo que forman la unión de las calles Florida y San Martín.
La zona donde se levantaría el futuro edificio era una de las más cotizadas de la ciudad e incluso había sido proyectada por la Comisión de Estética Edilicia como la “gran puerta de entrada a la ciudad”, ya que en el bajo se encontraban las Estaciones “Retiro” de los Ferrocarriles Central Argentino, Pacífico y Central Córdoba.
La intención de Corina Kavanagh era que su edificio le devolviera buena parte del dinero invertido. Su idea era destinar el alquiler de sus departamentos a las jóvenes familias ricas de Buenos Aires, los únicos que habían podido sobrevivir a la crisis económica. Por eso, se preocupó de que tuviera todo lo mejor de la época en cuanto a confort y adelantos. Para el proyecto fue convocado el estudio conformado por el arquitecto uruguayo Gregorio Sánchez, el ingeniero Ernesto Lagos y Luís María de la Torre.
El 24 de junio de 1933 fue subastada la demolición de las construcciones que existían en el terreno donde se levantaría el futuro edificio y a fines del mes de agosto éste quedó totalmente liberado de escombros. Finalmente, se comenzó con la estructura en enero de 1934. En un primer momento el Edificio Kavanagh iba a tener una altura similar a la de su vecino Plaza Hotel, pero finalmente, se decidió construir un rascacielos, que fuera el edificio más alto de Buenos Aires.
El hormigonado del “Edificio Kavanagh” se terminó el 28 de octubre de 1934. En ese entonces, se convirtió en la estructura de hormigón armado más alta del mundo, superando al Predio Martinelli de Sao Paulo.
El edificio fue finalmente inaugurado oficialmente el 15 de enero de 1936. Con unos 110 metros de altura hasta la azotea y 120,35 hasta la cima del mástil, se convirtió en el edificio más alto de Argentina y de Latinoamérica. Sus 30 pisos también fueron un récord para la historia de la construcción del país, ya que era la primera vez que un edificio llegaba a esa cantidad de niveles altos.
El Kavanagh debió limitar sus plantas al complejo perímetro triangular del terreno. Fue construido en base a cinco volúmenes yuxtapuestos: uno central, al que se adosan otros dos y a estos, otros dos, menores. La parte central con sus dos costados da la simetría al edificio.
Los números del Kavanagh fueron sorprendentes para su época. Durante su construcción debieron prepararse 1.500 planos y planillas para una superficie edificada de 25.800 m2. En las estructuras de hormigón fueron utilizadas 1.600 km. de barras de hierro en tanto que el total de las cañerías de agua, vapor, desagües y conductores eléctricos alcanzó los 90 km. La instalación eléctrica fue equivalente a la que se necesitaría para abastecer a una ciudad de 80.000 habitantes, a la vez que el equipo refrigerante del acondicionador de aire (único en el mundo) podía generar hielo para un conglomerado urbano de 75.000 personas.
El esquema del edificio se compone de sótano, planta baja, 30 pisos con un total de 102 viviendas repartidas en seis alas (A, B, C, E, F y G) y un mirador en la terraza, lo que sería el piso 31°. La planta baja fue dedicada a los grandes ambientes de recepción, con entrada cubierta para autos, salas de espera, de informaciones, de teléfonos, toilettes, vestíbulos y galerías.
El Kavanagh está incluido en la lista de patrimonio mundial del movimiento moderno elaborada por la UNESCO.
En 1934, cuando aún lo estaban construyendo, se aprovechó su frente para colocarle en su parte superior una cruz blanca de varios pisos de altura en adhesión al Congreso Eucarístico Internacional.

Fuente: Wikipedia y worldartdeco.blogspot.com

1 comentario:

  1. Una maravilla de edificio, para la epoca fue como importar una torre de NY.

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