Buenos Aires posee un patrimonio arquitectónico desconcertante y sugestivo. Las múltiples fuentes de inspiración y la tendencia local a la reelaboración consolidaron en los dos últimos siglos una herencia artística vasta y ecléctica. Este blog pretende mostrar a través de fotografías algunos de esos detalles que suelen escaparse a quien camina sin mirar por donde pasa.

lunes, 29 de agosto de 2011

Antigua Quinta de los Bancalari :: Actual Escuela Normal Nro 8



El edificio de Carlos Calvo 3150 data de 1865. Pasó por distintos dueños, uno de los cuales fue la familia Bancalari, con lo que se conoció en la zona como "la quinta de los Bancalari".

Obviamente el edificio no fue edificado para fines educativos, sino como casaquinta muy lujosa.

Aquí funcionó la Escuela de Verano Nº 9 desde el año 1941 y desde 1954 funciona nuestro Departamento de Aplicación como anexo del edificio de La Rioja 1042.

Algunos datos históricos:

- El 2 de mayo de 1810, primer día de clases, asisten al Dpto. de Aplicación 279 niños y en el nivel secundario 77


- Hasta que se abrió el “anexo” el turno mañana estaba destinado al nivel medio y el turno tarde al Departamento de Aplicación, en el edificio de la calle La Rioja 1042

- El primer Director de la escuela fue el profesor José Paz

- La Sra Alicia Moreau de Justo fue profesora de Literatura de la escuela

- En el año 1913 egresan 39 maestras

- El Jardín de Infantes se crea en 1949 con 25 niños

- En el año 1984 egresan las primera Profesoras de Enseñanza Primaria
Fuente: ens8primaria.blogspot.com

Centro Islámico de la República Argentina


El Centro Islámico de la República Argentina (CIRA) es una asociación civil de carácter religioso, cultural, educativo y social que no persigue fines de lucro y cuyas actividades abarcan todo el territorio de la República Argentina.

En el año 1931 un grupo de musulmanes decidió fundar la institución con el objetivo de organizar y representar a la comunidad islámica Argentina.

En 1981 el CIRA lleva adelante el proyecto de construir la primera Mezquita de estilo y arquitectura islámica de nuestro país, en el barrio porteño de San Cristóbal.

A fines de 1990 adquiere el inmueble sito en Humberto 1º 3046/54, donde se funda el Colegio Argentino-Árabe “Omar Bin Al Jattab” que a partir de 2009 se convierte en confesional.


El Centro Islámico de la República Argentina (CIRA), es la institución que nuclea a todas las instituciones islámicas del país, su función es la de representar a los musulmanes en el ámbito nacional. A su vez, el CIRA se encarga de la dirección de una escuela que funciona en el mismo predio donde este se encuentra. El Colegio Omar ibn Al Jattab, una escuela de de enseñanza primaria y secundaria, que ofrece formación religiosa opcional y extracurricular. También administra a la mezquita Al Ahmad (Alberti).

Como referente institucional, ejerce control y certificación de las actividades comerciales que requieren un aval islámico. Es decir interviene en la certificación oficial de procesos de control religioso en la elaboración de alimentos para exportación a países de tradición islámica, así como también autoriza a los actores involucrados en dicho proceso (las empresas).

Como portavoz de los musulmanes, el centro realiza actividades de relevancia cultural: ofrece cursos públicos sobre idioma y cultura islámica, presentaciones de libros, organiza conciertos, edita un periódico, publica libros y anuarios literarios referentes a la cultura islámica, se ocupa de organizar festejos religiosos y eventos ecuménicos, y lleva a cabo actividades de contención social y caridad. En los últimos años, el CIRA ha sido el precursor del dialogo interreligiosos e intercultural, buscando un espacio de representación dentro de los límites de la ciudad y del país.

Esta institución se encuentra organizada por una comisión directiva cuyos periodos de acción son renovados por medio de elecciones públicas que se realizan entre los miembros y asociados al centro. Si bien esta institución pretende ser el referente de la comunidad, los miembros de la conducción deben ser elegidos entre "musulmanes de origen", los empleados que desempeñen funciones administrativas o educativas pueden pertenecer a este grupo, ser musulmanes conversos o de otras tradiciones religiosas. Las listas de comisiones aspirantes a la dirección del CIRA, nos remiten siempre a tradicionales apellidos que se encuentran entre los fundadores de este, o históricas familias de la comunidad islámica (generalmente de la escena barrial de San Cristóbal, lugar del primer emplazamiento de los inmigrantes de origen musulmán).

Dentro de la comunidad islámica, esta es una institución que se encuentra permanentemente observada, en continuo estado de evaluación y cuestionamiento. Generalmente le es criticado su proceder institucional, su sistema de organización y en muchos casos las sospechas de corrupción interna son moneda corriente al ser una institución vinculada al comercio y a la política. Las críticas apuntan frecuentemente a que sus referentes institucionales, generalmente no lo sean en el ámbito religioso. Y de ahí que muchas personas caractericen al CIRA como un espacio no religioso, y no representativo de la comunidad.

La tendencia creciente entre los miembros de la comunidad, es la de ver y percibir al CIRA como un lugar de expresión de poder institucional dentro del orden estatal en el cual interactúa, es decir un organismo más empeñado en el desarrollo de las actividades propuestas en la agenda política de la ciudad, que en la arena del terreno religioso.


Fuente: islam.org.ar







martes, 9 de agosto de 2011

Escultura "Hercules Arquero"


Heracles arquero, realizada en 1909, es la escultura más conocida del escultor Antoine Bourdelle. Representa uno de los doce trabajos de Heracles, en el que debe abatir los pájaros del Estínfalo.
 
Surgió a partir de un encargo del financiero y mecenas Gabriel Thomas. La obra inicialmente iba a ser de un sólo ejemplar según los deseos de Gabriel Thomas. Presentada en el Salón de la Sociedad Nacional de las Bellas Artes de 1910, la escultura de bronce dorado causó sensación.

La Municipalidad de Buenos Aires compró una copia a su autor, a fines de los años 30, en 20.000 pesos (entonces era intendente César Caccia).
 
Es una de las esculturas más importantes que tiene Buenos Aires, estuvo guardada por cuatro años (2001-2005) en los talleres de Monumentos y Obras de Arte, pertenecientes a la Dirección de Espacios Verdes.
 
La ubicación del "Heracles Arquero" en la Plaza Dante (Libertador, Figueroa Alcorta, Pueyrredón y Emilio Petorutti) no es un capricho. Junto a "El último centauro", otra obra de Bourdelle colocada a pocos metros, componen una dupla escultórica que remite a la mitología griega.
 
"Es una escultura de bronce hueco hecha a la cera perdida; fue concluida en 1909, mide 2,40 metros de altura por 2,30 de longitud y pesa más de 500 kilos. Esta obra —de ruptura con el espíritu romántico de Rodin— establece una bisagra en la historia de la escultura del siglo XX: la integración de las líneas planas y los vacíos que demarcan hacen del espacio un volumen, abriendo las puertas del arte escultórico a la modernidad.
 
La obra está, en la Plaza Dante, frente a la Facultad de Derecho desde el 17 de julio de 1944, su primer destino había sido, en 1938, la Plaza Lavalle.

Fuente. laesculturaurbana.blogspot.com
 

Monumento a Bartolomé Mitre



El Monumento a Bartolomé Mitre es una escultura realizada en su honor, ubicada en el barrio de Recoleta en Buenos Aires, Argentina.

Bartolomé Mitre (Buenos Aires, 26 de junio de 1821 - 19 de enero de 1906) fue un político, militar, historiador, hombre de letras, estadista y periodista argentino; gobernador de la Provincia de Buenos Aires y Presidente de la Nación Argentina entre 1862 y 1868.
 
El monumento, obra de los escultores italianos David Calandra y Eduardo Rubino, se encuentra emplazado en la Plaza Mitre, entre las calles Aguero y Dr. L. Agote y la Avenida del Libertador. La figura de bronce de Mitre se encuentra sobre un basamento de granito rojo pulido y rodeado de alegorías de mármol de carrara. El monumento fue inaugurado el 8 de julio de 1927, con un discurso del Presidente Agustín P. Justo.

Fuente: Wikipedia

domingo, 7 de agosto de 2011

Bar Carlitos


En el año 1908, Don Manuel García inaugura en la esquina de Carlos Calvo y Saavedra, en el barrio de San Cristóbal, el Bar “Carlitos”, que debe su denominación a la manifiesta admiración de su dueño por Carlos Gardel. El mismo nació como almacén y despacho de bebidas, como lo acredita la antigua chapa enlozada que lo identifica.

El lugar ofició de proveedor con libreta negra de hule, en tiempos de conventillos sin supermercados a la vista. La memoria nostálgica de los parroquianos rescata a famosos habitúes del lugar, como por ejemplo a Ada Falcón, que solía hacer compras en el antiguo almacén. A Enrique Muiño, vecino de la calle Carlos Calvo y Pichincha, quien pasaba a diario a beber su cafecito en el lugar. Nombran orgullosos a Razzano, guitarrista de Gardel, quien vivía en un conventillo de Carlos Calvo 2540 y era frecuente encontrarlo entre las mesas del bar. Recuerdan a Roberto Ray, cantor de la orquesta de Osvaldo Fresedo, quien allá por el año 1945 vivía en la intersección de las calles Estados Unidos y Jujuy. Hablan de los hermanos Puccio, guitarristas de Hugo del Carril, quienes eran clientes y solían tocar la guitarra en rueda de amigos. De Atilio Stampone, cuando cursaba la primaria en la Escuela “Chorroarín” y pasaba por allí a comprar golosinas. Rememoran que, por aquellos años, eran asiduos concurrentes, los integrantes del dúo cómico Buono-Striano, el apellido de Rafael era Bueno y vivía enfrente, recuerdan.

El Bar “Carlitos”, a punto de cumplir sus primeros cien años de vida, permanece original, y entre sus valiosos objetos antiguos podemos destacar una vitrola que aún resiste, un Wincofon, viejos tarros de lechero y un cartel de 1892 que expresa textualmente: “Por orden del comisario se prohíbe entrar armado y con sombrero al despacho de bebidas”. El letrero rememora una época donde las discusiones las ganaba aquel que quedaba en pie.

El último estaño de San Cristóbal, como se lo conoce, fue reconocido el 11 de noviembre de 2004 por el Museo de la Ciudad, como “TESTIMONIO VIVO DE LA MEMORIA CIUDADANA”, por conservar el carácter original de un tradicional café y despacho de bebidas de principios del siglo XX.


Fuente: nuevociclo.com

Edificio en Av. Belgrano 2280 :: Galería Monte Cudine


La Galería Monte Cudine está ubicada en la Avenida Belgrano 2280 del barrio de Balvanera.

En el año 1870 un inmigrante italiano que había llegado por los años 40 a las costas uruguayas en el más total estado de pobreza, había evolucionado gracias a una carrera comercial que, al cabo de unos años lo premiaría con la obtención de una representación para comerciar en esta zona del mundo la bebida alcohólica amarga de fabricación italiana denominada “Amaro (por amargo) Monte Cudine”.

La sociedad que había formado Geosué Bonomi para desarrollar sus negocios decidió instalarse en Buenos Aires para centrar en esta ciudad la distribución del nuevo producto. Con ese propósito adquirió el edificio ubicado en la Avenida Belgrano N° 2280. El inmueble, hoy denominado “Pasaje del Mueble y la Decoración” ubicado en la Avenida Belgrano 2280, data del año 1870, si se da crédito a la tradición que narra el anecdotario del vecindario. Sea o no esa la fecha exacta de su construcción, se sabe con certeza que fue adquirido en 1886 por la sociedad de italianos inmigrantes que habían tocado tierra inicialmente en el Uruguay.
Por esos tiempos el país entero contaba con unos 3.250.000 habitantes, y la ciudad de Buenos Aires, en la que habitaban 430.000 almas, llegaba hasta la avenida Callao y muy poco más. Entre Ríos-Callao comenzó a ser empedrara en 1870, y San Juan se abrió recién en 1871. Sin embargo a lo largo de la calle Rivadavia se extendía una suerte de urbanización estimulada por ser el acceso al Mercado de los Corrales, hoy Plaza Miserere, en el que se concentraban los carruajes que trasportaban mercaderías provenientes del Norte y Oeste del país. Pero en cuanto se apartaba de esa arteria, llamada Camino Real, el visitante se encontraba como en pleno campo. Las razones de esa angosta “extensión” edilicia tienen que ver también con la inauguración del tranvía a caballo de los hermanos Lacrosse que iba desde la Casa de Gobierno hasta la Plaza Once por Cangallo y volvía por la calle de la Piedad (hoy Bme. Mitre) y con la cercanía del Ferrocarril del Oeste que desde la actual plaza Libertad llegaba hasta Floresta pasando por lo que hoy es la av. Corrientes y luego acercándose a la Plaza Once.

El entorno, hoy llamado barrio de Balvanera, estaba constituido mayormente por quintas de hasta 25 ha. entre las que abundaban los pantanos. Anteriormente, en tiempos de Rosas, algunas concentraciones de edificaciones precarias daban alojamiento a una alta proporción de población negra, siempre favorecida por el tirano, por lo que se dio en llamar al lugar, junto con Montserrat, “Barrio de los Tambores”. Con la llegada de la inmigración, mayormente compuesta por italianos en esa zona, la población blanca fue superando a la población de color. La urbanización, al extenderse al oeste por la calle Rivadavia fue dando vida a la zona, en la que poco a poco se fueron instalando industrias y algunas viviendas.

Frente mismo al “Pasaje del Mueble”, en Av. Belgrano 2297 subsiste todavía una notable casa de altos en la que se indica claramente en su frente, como año de construcción, 1888. El epicentro de mayor densidad de Balvanera se ubicaba en esos años entre las primeras tranqueras del Mercado de los Corrales y el Mercado Ciudad de Buenos Aires fundado por David Spinetto (hoy “Shopping Spinetto”), instalado a solo 100 metros de la planta “Monte Cudine” que se solicita catalogar. Se destacó en la época el teatro Doria, sobre Rivadavia a esa altura, también en las cercanías. Dicho teatro, conocido también como “el galpón”, era considerado como el teatro de ópera barata, dado que las compañías que actuaban en él eran de segundo o tercer orden. El advenimiento del colegio San José dio también un impulso urbanístico al barrio, que no obstante, seguía teniendo dificultades de acceso, calles de tierra y carencia de iluminación hasta bien avanzada la década de los noventa.

La adquisición en Buenos Aires de este edificio fue realizada para instalar allí la representación y distribución del comentado “amaro”, amargo proveniente de Italia, del que aún subsiste en su fachada la marca “MONTE CUDINE”. La bebida era trasportada hasta allí en carrozas de tracción a sangre desde su desembarque en las orillas bonaerenses para ser almacenada, probablemente fraccionada y luego distribuida a las pulperías porteñas y/o destinadas a almacenes de ramos generales de las incipientes poblaciones del interior. La mercadería ingresaba por el portón central que originalmente habrá sido de tierra y luego adoquinado, era descargada y estibada en los sótanos que aún se pueden apreciar, y los carruajes continuaban hasta el fondo donde se encontraban los corrales originales. En ese fondo, cuando la tracción a sangre pudo ser sustituida, la familia Bonomi, propietaria del negocio, construyó su residencia de tres pisos cuyos vestigios aún subsisten, una de las primeras de la ciudad dotada de ascensor. Hoy quedó inserta en el centro de la manzana, bloqueada por el Pasaje sobre Belgrano y por un cine construido sobre la calle Venezuela.

Debajo de las lajas con que se recubrió hace pocos años el piso de esa entrada, yacen los adoquines originales, según nos informan vecinos que recuerdan la “puesta en valor” encarada en el año 1980 para adaptar el edificio a su destino actual. Curiosamente la entrada al cine sobre la calle Venezuela al 2245, paralela a Belgrano, justo donde daban los fondos del “Monte Cudine”, tiene las características de un ingreso vehicular de adoquines similares a los usados en la época, que están a la vista y que por su ubicación y el ancho del ingreso coincide con lo que hubiese sido la salida del pasaje por la calle posterior.
Fuente: http://www.martavarela.com.ar/ 





Casa en Malasia 854 (ex Arribeños)


Esta vivienda unifamiliar ubicada en la calle Malasia 854 del barrio de Palermo es una obra del arquitecto Estanislao Pirovano.

Pirovano utiliza los frontones arequipeños en esta casa y demuestra aquí haber adquirido además elementos propios que utiliza en todas sus obras de esta época, sobre todo piezas de hierro forjado, como herrería para balcones, rejas, luminarias y dragones alados. Como en la Quinta Anchorena, en esta obra el protagonismo lo da el frontón, mientras que el resto de la fachada disminuye su intensidad.

Se destaca además un balcón de madera –acorde a la tradición peruana- pero este no quita protagonismo al portal central.


Monumento a Mahatma Gandhi



Este monumento a Mahatma Gandhi fue realizado por el escultor Ram Vanji Sutar y donado por la Embajada de la India en conmemoración del 50 aniversario de la independencia de su país.

Está instalado en la plaza Sicilia, en el Parque 3 de Febrero del barrio de Palermo.

Fuente: peace.maripo.com